Fabrica de hielos Madrid

Hielo Blasco, es una fábrica de hielos Madrid con amplia experiencia en el sector puesto que lleva más de 20 años en el mercado del hielo.

La fabricación de hielo es un proceso que debe ser cuidadosamente atendido y en el que deben ser tenidos en cuenta múltiples aspectos que, de no respetarse, podrían afectar gravemente a la calidad del propio producto y de los productos con los que se acompaña y, siendo esto todavía más importante, podría afectar a la salud del consumidor.

Existen en la actualidad unas estrictas normas sanitarias y una normativa internacional (ISO 9001) que deben respetarse para asegurar que el género final es apto para el consumo humano. Desde nuestra empresa, cumplimos con todas las normativas vigentes, lo cual nos es reconocido mediante la certificación de la reconocida firma internacional LRQA.

Algunos de los elementos que nos distinguen como una excelente fábrica de hielos Madrid es que contamos con una fuente de agua adecuada para la elaboración del hielo. Así, por tanto, saber que esta procede de los manantiales del área de Madrid, como los de Hielo Blasco, concede un plus de calidad al artículo que finalmente vayamos a consumir.
También contamos con una serie de filtros profesionales que eliminen cualquier impureza que pueda existir en el agua. Un buen ejemplo de ello es la utilización del sistema venturi que se realiza en la fabricación de nuestros hielos.

Hoy en día, cualquier elaboración industrial debe estar acompañada de una correcta mecanización y automatización, y en este sector no podría ser de otro modo.
A lo largo de todo el proceso es imprescindible que ningún individuo manipule directamente ninguno de los artículos de la producción, pues de este modo se evita la existencia de ningún foco de contaminación, por tanto desde nuestra fábrica de hielos Madrid, llevamos un exhaustivo control sanitario y de manipulación.

Una vez llevado a cabo el filtrado, el agua pasará por unas enormes tuberías donde se llevará a cabo la congelación. Los hielos de gran tamaño, posteriormente se cortarán con la forma adecuada. El hielo de menor tamaño, después de cortarse, se volverá a someter a una segunda congelación para darle fuerza y evitar que se derrita.